En el Tokumen
En el aeropuerto de Ciudad de Panamá hay gente. Mucha. Son las
2:43pm y se oyen acentos latinoamericanos. Se ven indígenas y personas negras y
muchos mestizos y algunos blancos. ¡Esta es la diversidad de nuestro
continente!
Sentada en un lugar estratégico que me permite ver la
pantalla de salidas de vuelos, caminar hasta el baño y eventualmente la sala de
abordaje, tomo Coca Cola. La compré en Nathan´s de un hombre panameño y muy
amable que se despidió con un “hasta luego joven”.
Estoy sentada y cómoda (dentro de lo que permite la silla
gris plástica y no ergonómica) frente a una monja con el pelo cubierto (y
pienso en la alharaca que a veces se crea por las mujeres musulmanas que se
tapan el pelo, pero poco se dice algo de las monjas católicas), al lado
izquierdo está una mujer de pelo blanco inmersa en su Kindle y, al otro lado me
acompañan una mujer que habla portugués con una niña de no más de seis años.
El anuncio de la aerolínea dice que salen tres vuelos de
Copa Airlines a la misma hora a Sao Paulo. El lugar, la sala 130, 131, The
coffee bean & tea leaf shop y Nathan´s (mi Nathan´s) está lleno aunque con
sillas duras disponibles para sentarse.
La moda que veo es diversa tanto como sus portadores. Se imponen
los tennis blancos, tights negros, jeans apretados aún en tallas grandes; pelo
corto en los hombres.
Pasan tres chinos ancianos.
Dentro de los destinos de viaje que se ven en la pantalla de
las 12:33pm hasta las 10pm están Boston, San José, Toronto, Caracas, Rosario,
Guayaquil, Bogotá, Cali, Santiago de Chile, David, Medellín, Salta, Madrid,
Nueva York, Miami, Orlando, Chicago, Frankfurt, Amsterdam, Cancún, Santo
Domingo, Havana (sic), Port of Spain (sic).
Los vuelos de este día, contando rápido son más de 95. Para ser
un aeropuerto con infraestructura media, reflejado en la regular calidad de sus
baños, sillas incómodas, poca oferta de restaurantes, no está mal la alta
afluencia de vuelos internacionales.
Llaman a abordar. Mi periplo continúa.
Comentarios
Publicar un comentario